domingo, 8 de julio de 2012

Fifty Shades Freed de E.L James

Cuando la poco conocedora Ana Stelee encuentra por primera vez al vigoroso y dañado empresario joven Christian Grey, una aventura sexual destelló que cambió sus vidas irrevocablemente. Sorprendida, intrigada y ultimadamente repelida por los singulares gustos sexuales de Christian, Ana pidió un compromiso más profundo; determinado a conservarla, Christian aceptó.

Ahora, juntos, tienen más –amor, pasión, intimidad, y un mundo de infinitas posibilidades–. Pero Ana siempre supo que amar a su Cincuenta Sombras no sería fácil, y estar juntos establece desafíos que ninguno de los dos anticipó antes. Ana debe aprender, de alguna manera, cómo compartir el opulento estilo de vida de Christian sin sacrificar su propia integridad, identidad o independencia; Christian debe, de alguna forma, vencer su compulsión por controlarlo todo, y dejar de lado los horrores que infestaron su pasado y cazan su presente.

Justo cuando parece que juntos su amor puede conquistar cualquier obstáculo, la desgracia, la malicia y el destino se combinan para hacer que las peores pesadillas de Ana se hagan realidad. Sola y desesperada, debe enfrentar el envenenado legado del pasado de Christian.

 ¡Como extrañaré a mi Fifty!

Esta triología me encantó y pensar que no seguirá, ayer me mantuvo en depresión. Pensaba: Si sigo así, enamorándome de cada chico que leo en un libro, jamás tendré novio. Nunca encontraré a nadie como un Fifty.

Aunque fue un final de cuento de hadas, creo que es el final correcto. Christian merecía, después de sus 28 años, ser feliz y pasar la hoja, lo que nunca pudo hacer antes de conocer a Ana.

El tercer libro empieza en la luna de miel, recordando el deseado matrimonio de la pareja. Esa parte es romántica y divertida. Hay algunas escenas que Ana desafía el temperamento de nuestro Fifty y siempre es divertido ver cómo Christian reacciona ante las descisiones de Ana.

Pero es ahí cuando empiezan los problemas y sabemos quién es el principal sospechoso, ya que en el segundo libro había un pequeño fragmento al final del sospechoso, que las que lo han  leído sabemos quién es. Ese sospechoso es el causante de los problemas que viven Ana y Christian.

Al volver a la realidad todo se vuelve mas interesante, las descisiones de Ana y Fifty chocan bastante y muchas veces Fifty ha tenido que contar hasta MIL para calmarse, aunque hubo una parte en la que explotó y crisis.... uuhhh.... Aparte que Fifty está histérico, porque alguien (sospechoso) está investigando a Cincuenta  y eso involucra a su familia. Imaginense cómo está Fifty de protector con Ana. Me hace reír.

Pero la pasión (1313) sigue vivita y coleando. A pesar de las fuertes peleas que sufre la pareja, terminan con un Te amo, revelaciones y a la cama. Ana comienza a abrirse un poco más con respecto a la sala de juegos, obviamente jamás permitirá cosas morbosas (como los latigazos y eso), pero trata de complacer a Fifty y al mismo tiempo a ella le gusta. 

Mirar al señor Grey tan romántico y dedicado con Ana te hace deretir, no como el primer libro cuando conocimos al frío y desinteresado pedazo sexual Grey. Este hace el amor y el sexo... y la mayoría de las veces hace el amor y la trata como si fuese de cristal (cuando no se trata solo de sexo). 

Si conocimos el pasado de Christian en Fifty Shades of Darker, acá conocemos algunos detalles. Aún sigue atormentado, duda de todos y se autodesprecia. Pero ahí está Anastasia, su contensión y es tan lindo cuando se ve tan vulnerable y ella lo abraza. Yo quiero abrazar a ese hombre.


El libro siempre transcurre de forma interesante. Discuten bastante, pero eso no implica que su amor se apague, de hecho, en cada pelea se fortalece más la relación. Sí, hay que reconocer que hay dos peleas bastante fuertes entre ambos, la última que no revelaré, es bastante intensa y dan ganas de pegarle al impulsivo e inexperto Fifty y llorar junto a Anastasia. Lo que puedo decir, es que las palabras hieren mucho más que los actos. Es ahí cuando la pareja se distancia un poco, pero aún así se quieren, pero no saben cómo reaccionar. 


Pero Fifty siempre se tiene que dar cuenta de mala forma que todas sus conclusiones son erradas y que Anastasia SÍ lo AMA incondicionalmente. 

De verdad verlo vulnerable te conmueve ahahha.

El final es hermoso, como dije, un final feliz típico, pero bien merecido. A pesar de que el pasado de Christian siempre tendrá una marca, creo que él ha dado vuelta la página, su vida dió un giro inesperado y lo vemos feliz y no arrastrando a sus cincuenta sombras. Es un hombre que sufrió mucho, un hombre inseguro que siempre vivió en las sombras, cargado de odio y rabia y cada día recordándose su pasado desafortunado. En esta triología es evidente que el dinero no compra la felicidad, Fifty nunca fue feliz a pesar de tener el mundo a sus pies, hasta que conoció a Anastasia Steele y su mundo se volvio de cabeza.

Por parte de Anastasia, es admirable. La chica tiene una paciencia de oro con Christian, sí, también se enoja a veces, pero hay que recalcarle siempre a Fifty los límite. El tipo es super aprehensivo y sobreprotector con ella, se rompe una uña y el pobre sufre (eso me enamoró!).  Pero aún así nunca duda de lo que siente y está dispuesta a contenerlo en sus momentos de debilidad, cuando él hecha de menos su parte dominante, y le entrega ese afecto y atención que en su pasado nunca tuvo. Y quién no sacrificaría la vida por este hombre, ¿Quién no?

En muchas revistas y diarios se ha comentado un montón esta trología, más aun Fifty Shades of Grey, por su parte erótica y la parte dominante (machista) de Fifty. Sí, tiene MUCHO sexo, sobretodo este último que lo hacen a cada cinco minutos, pero (voy a hablar por mí. No sé si las demás se sienten así y efectivamente lo leyeron por sexo), a pesar de ello, a pesar de lo HOT que es Christian, creo que al empezar a conocerlo es lo que cautiva, como Anastasia movió el piso en el que pisaba tan fuertemente, que su rutina aburrida de su vida cambia radicalmente. La relación que llevan es tan distinta como lo describia Christian con sus sumisas, cómo él trata a Ana con tanta atención, preocupándose de ella, su centro del universo. Lo amé. Detrás de esa máscara de frivolidad, desinterés, esa superioridad de las cosas, y su forma cortante al hablar sin rodeos, hay un hombre que sufrió, un hombre que no tuvo infancia, ni adolecencia, que su pasado lo atormenta y aún lo tiene sobre sus hombros; pero hay un hombre tierno y romántico (a su manera), un niño. ¿Quién no se enamora de él, aunque sea de fantasía?. Yo debo admitir que lo odiaba al principio, pero al seguir con la historia cambié rápidamente de antención.


Si este, en su principio, fue un Fan Fics de Twilight, el FF superó con creces a la Saga. El libro, ahora independiente de la saga de Twilight la superó.


Ayer terminé este libro, olvidándome que tenía que estudiar. Libros así te consumen. Como he estado enferma toda esta semana me he leído el libro con mucha ansiedad y siempre cuando tenía que dejar de leer con deseos de seguir. 


Ahora llegan a Chile, el cual ya tengo el primero y me lo leere en vacaciones sin distracciones, por eso espero las ansiadas vacaciones que se acercan. En septiembre y noviembre llegarán las demás, los cuales ya tengo el dinero apartado. Esos los compro SÍ O SÍ. Tendré un verano con Fifty xD.






El libro lo recomiendo a ojos cerrados, obviamente a las mayores de 18 ahahaha.


Besos!

 


 

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